¿Buscas una receta de pan casero que llene tu hogar de un aroma irresistible? Con solo unos pocos ingredientes básicos y algo de paciencia, puedes hacer un pan suave y esponjoso, con una corteza dorada y crujiente. Esta receta de pan casero es perfecta para acompañar tus comidas o para disfrutar en el desayuno con un poco de manteca y mermelada.
Ingredientes para llevar a cabo la receta de pan casero básico:
- 500 g de harina 000
- 300 ml de agua tibia
- 10 g de levadura seca instantánea
- 10 gramos de sal
- 1 cucharada de azúcar
- 2 cucharadas de aceite de oliva
Sigue estos pasos para preparar tu receta de pan casero básico:
- En un bol pequeño, mezcla la levadura con el agua tibia y el azúcar. Deja reposar durante 5-10 minutos hasta que se forme una espuma.
- En un bol grande, añade la harina y la sal, y mezcla bien.
- Agrega la mezcla de levadura y el aceite de oliva a la harina. Amasa hasta obtener una masa suave y elástica (unos 10 minutos).
- Coloca la masa en un bol ligeramente aceitado, cúbrela con un paño húmedo y deja reposar en un lugar cálido hasta que duplique su tamaño (aproximadamente 1 hora).
- Una vez que la masa haya levado, desgasifícala y forma un pan o bollos individuales. Colócalos en una bandeja de horno.
- Deja reposar nuevamente durante 30 minutos. Precalienta el horno a 180°C.
- Hornea durante 25-30 minutos, o hasta que el pan esté dorado y suene hueco al golpearlo en la base.
Para que tu receta de pan casero sea un éxito, toma en cuenta los siguientes tips
- Temperatura del agua: Asegúrate de que el agua esté tibia, entre 35-40°C, para activar correctamente la levadura. Si el agua está demasiado caliente, puede matar la levadura y evitar que la masa leve.
- Amasado: Amasa bien la masa para desarrollar el gluten. Si tienes una amasadora eléctrica, úsala durante unos 8-10 minutos en velocidad baja.
- Leudado: Deja que la masa repose en un lugar cálido y sin corrientes de aire. Si la temperatura ambiente es baja, puedes colocar la masa en el horno apagado con la luz encendida.
- Humedad en el horno: Coloca un recipiente con agua en la parte inferior del horno mientras horneas el pan. Esto ayuda a crear una corteza más crujiente.
Ya sea que lo disfrutes recién salido del horno o tostado al día siguiente, este pan casero es una verdadera delicia que seguramente se convertirá en un favorito en tu hogar. ¡Anímate a prepararlo y a experimentar con diferentes sabores y formas!